Qué hermosa es la vida cuando nos despegamos de lo material.
Invertimos el 80 % del tiempo en cosas que son absolutamente inútiles y eso es mucho tiempo. Es energia desperdiciada que estamos dedicando a un objeto, a una relación, a un vínculo o a algo que tarde o temprano no nos va a servir. Las cosas cambian y no duran para siempre.
En los países orientales educan con la ley de la impermanencia, de que las cosas se van y no son para siempre y hay que estar preparados para la pérdida.
En nuenstra sociedad hemos sido educado al revés, de manera que no no hay nadie que esté preparado para la pérdida.
Con los apegos perdemos la dignidad, el respeto y los valores más esenciales. Aprender a prescindir de algo o de alguien es muy importante; cuando lo hacemos, estámos con un pie en la liberación.
!! Apégate a la Vida !! ....